Desde que en Talca, hace 10 años, comenzamos a celebrar la independencia de Chile, mucho se ha dicho. Algunos creen que Concepción es la ciudad de la libertad, otros aseguran que fue Santiago; pero nosotros, los talquinos, no tenemos duda de que fue en nuestra tierra. Versiones pueden haber muchas, pero la tradición de conmemorar el 12 de febrero ya es marca registrada en la capital del Maule.
No me quiero centrar en esa discusión, en esa pelea entre ciudades por adjudicarse este hecho histórico, sino que quiero hablar del presente. Un presente que nos demuestra que en Talca se le dio el lugar que corresponde a una fecha tan importante como el 12 de febrero de 1818. Hubo años de olvido en el país, pues la gesta de este día hace 201 años, siempre ha estado opacada por las celebraciones de Fiestas Patrias del 18 de septiembre.
En Talca logramos rescatar, dar vida, y conmemorar que el Padre de la Patria, Bernardo O’Higgins, firmó el Acta de la Independencia en la capital del Maule. Logramos dar identidad a una ciudad que hoy es reconocida en todo Chile por ser la cuna de la libertad, y nuestra Región del Maule se ha consolidado como el lugar donde se viven, como en ningún otro lado, las tradiciones del país.
Me siento orgulloso de haber dejado esa huella durante mi periodo como alcalde, y que hoy se siga conmemorando y dando importancia a esta fecha. Es impresionante y emocionante ver cómo más de 100 mil personas por noche llegan hasta el Río Claro para disfrutar de la Fiesta de la Independencia, evento al que junto a mi equipo dimos vida hace ya una década, y que hoy es la celebración más grande del país.
El 12 de febrero de 1818 comenzó a existir un Chile independiente. 201 años de historia que por décima vez consecutiva celebramos en grande en Talca, en la capital de la Región del Maule, una zona huasa, campesina y de esfuerzo, donde día a día nos sentimos orgullos de ser parte de la historia de nuestro país. ¡Viva Chile!